miércoles, 26 de septiembre de 2012

TENDENCIA




Tendencias

El concepto de tendencia es absolutamente esencial para el enfoque técnico del análisis de mercados. Todas las herramientas usadas por el analista técnico tienen un solo propósito: detectar y medir las tendencias del precio para establecer y manejar operaciones de compra-venta dentro de un cierto mercado.

El concepto de tendencia no es privativo de los mercados financieros. En un sentido general, es un patrón de comportamiento de los elementos de un entorno particular durante un período. En términos del análisis técnico, la tendencia es simplemente la dirección o rumbo del mercado. Pero es preciso tener una definición más precisa para poder trabajar. Es importante entender que los mercados no se mueven en línea recta en ninguna dirección. Los movimientos en los precios se caracterizan por un movimiento zigzagueante. Estos impulsos tienen el aspecto de olas sucesivas con sus respectivas crestas y valles. La dirección de estas crestas y valles es lo que constituye la tendencia del mercado, ya sea que estos picos y valles vayan a la alza, a la baja o tengan un movimiento lateral.

Tipos de tendencias
Tendencia alcista: cuando estas trayectorias son al alza, decimos que nos encontramos con una tendencia alcista; en este caso, la demanda presiona más que la oferta provocando que la cotización suba.
Tendencia bajista: si por el contrario, la trayectoria es a la baja, la tendencia será bajista. Esto se debe a que es la oferta la que presiona, haciendo que la cotización descienda.
Tendencia lateral: Si, observado ese periodo de tiempo, el mercado no se decide por ir al alza o a la baja, porque las fuerzas oferentes y demandantes se encuentran equilibradas, nos encontraremos ante un mercado plano o tendencia lateral.

Por otro lado las tendencias tienen tres clasificaciones, hay que identificar entre tendencias de largo plazo, tendencias de medio plazo y tendencias de corto plazo. Según la teoría de Dow:
Tendencia de largo plazo: es aquélla que se produce en más de un año.
Tendencia de medio plazo: la que tiene una duración de entre tres semanas y tres meses
Tendencia de corto plazo: las de duración menos a tres semanas.

Las tendencias frecuentemente se dividen en tendencias de largo plazo o tendencia principal, de mediano plazo o tendencia intermedia y de corto plazo o tendencia inmediata. En realidad, existe un sinfín de tendencias, desde las de muy corto plazo, que son vigentes por minutos u horas, hasta las tendencias que se desarrollan durante cincuenta años o más. La mayoría de los analistas técnicos restringen, sin embargo, su estudio a tres períodos, aunque siempre hay cierta ambigüedad sobre la forma de elegirlos.

Cada tendencia se vuelve una parte de la tendencia inmediatamente mayor. La tendencia intermedia es un ajuste de la tendencia principal, que corrige por un par de meses antes de continuar con su movimiento original. La tendencia intermedia está formada, a su vez, por ondas alcistas y bajistas que constituirán las tendencias de corto plazo del estudio en cuestión. La idea de que una tendencia siempre forma parte de una tendencia mayor y a su vez está formado por tendencias de más corto plazo aparece recurrentemente en los estudios de análisis técnico, permitiéndonos aplicar conceptos tan sofisticados como los fracteles al comportamiento de los mercados.

El analista técnico siempre comienza su estudio por la tendencia principal, posteriormente la intermedia y termina con la de corto plazo. La tendencia principal nos permite establecer la dirección general del precio, aunque frecuentemente sus parámetros son excesivamente amplios para poder operar sobre ellos. La tendencia de intermedia normalmente es la base de la operación, mientras que los retrocesos de corto plazo representan mejores precios de entrada al mercado en la dirección del mediano plazo.
 Fuente Wikipedia